lunes, 3 de enero de 2011

SARDIO

SARDIO


"19Y los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era jaspe; el segundo, zafiro; el tercero, calcedonia; el cuarto, esmeralda; 20el quinto, sardónica; el sexto, sardio; el séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el noveno, topacio; el décimo, crisoprasa; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista". Apo. 21:19-20.

El apóstol Bartolomé
Apocalipsis 21: 20, la segunda frase: "el sexto, sardio". El sexto cimiento del muro de la Nueva Jerusalén es de sardio, que aquí el traductor tradujo cornalina. La palabra en el griego es sardio, pero también hay variedades de sardio y una de ellas es la cornalina; también se le llama carneola o carnelita, que son diferentes piedras; esta es la sexta piedra, por lo tanto, corresponde al sexto apóstol. Ese sexto apóstol, como ustedes lo pueden ver en las listas que están en los evangelios, y aparecen ya sea en Mateo, Marcos y Lucas; siempre el sexto es Bartolomé, cuyo nombre es Natanael. Natanael es el mismo Bartolomé; Natanael es como decir el nombre, y Bartolomé es como decir el apellido. La partícula prefijo Bar en arameo significa hijo, hijo de Tolomé, o de Talmai, como se diría en esos idiomas; Natanael Bartolomé. Ese es en todas las listas de Mateo, Marcos y Lucas, el sexto; y cuando tú lo lees en el griego aparece asociado con Felipe; Bartolomé fue convidado al Señor Jesús por Felipe y el Señor los usó bastante juntos, incluso hasta la muerte de Felipe; después Bartolomé continuó haciendo su trabajo, pero trabajó mucho con Felipe y lo acompañó hasta su muerte; incluso participó de parte de su martirio, pero, cuando habían matado a Felipe, y también tenían en suplicio a Bartolomé, hubo un terremoto en la ciudad, de manera que se asustaron las personas y quisieron soltar a los dos y ya había muerto Felipe; pero soltaron a Bartolomé. Después, Bartolomé viajó a Licaonia donde ya Pablo había estado cuando con Bernabé quisieron adorarlos como a dioses porque hicieron milagros; y en esa región de Licaonia trabajó después de la muerte de Felipe que fue yo creo más o menos alrededor del año 58; Bartolomé evangelizó esa región e hizo un trabajo en toda esa región y es recordado por su trabajo en Licaonia. Después, Bartolomé viajó a la India, aunque el nombre de la India no se restringía a lo que es hoy el nombre de la India; hoy el nombre de la India es exclusivamente un país: antes, por ejemplo, estaba Sri Lanka; más al oriente era también parte de la India, lo que es Bangladesh. De todas maneras hay noticias de que el apóstol Bartolomé estuvo en la India.

Por el año 180, Panteno, que era uno de los líderes de la escuela de Alejandría, fue enviado por los líderes de la Iglesia en Alejandría, que los dirigía Demetrio de Alejandría; enviaron a Panteno a la India, y cuando él llegó a la India, se encontró con que allá en la India ya había cristianos que los había evangelizado el apóstol Bartolomé en una sección de la India; porque en otra fue Tomás (aunque todavía lo de Tomás, no lo vamos a tratar). Bartolomé estuvo en la India, y dice Panteno que Bartolomé había llevado una copia del evangelio de Mateo escrita en hebreo; entonces Panteno encontró que los cristianos que él contactó en la India ya tenían el evangelio de Mateo que había llevado Bartolomé; incluso, él hizo copia y lo trajo de vuelta cuando regresó a Alejandría. Entonces hay noticias de la manera como el Señor usó a Bartolomé en la India, a todos ellos, pues nos lo dice la Biblia, Dios los usaba con mucha gracia y con muchas señales, prodigios, echando demonios. Tengo aquí unos datos de Bartolomé en la India donde él estuvo; llegó a una ciudad de la India y en esa ciudad se adoraba a Astarot, aquel demonio, aquel espíritu maligno, y Bartolomé llegó y se identificó y comenzó a vivir con los pobres; incluso, iba a posar con los pobres en el templo de Astarot; y por la presencia y oración e intercesión de Bartolomé, el ídolo ya no podía más comunicarse y se quedó anulado; todos los oráculos que venían quedaron totalmente frenados solamente por la presencia y evangelización de Bartolomé; entonces ellos fueron a otra ciudad a consultar otro espíritu para explicar por qué ya no les hablaba más aquel ídolo y por qué ya no había más oráculos de parte de aquellos falsos dioses, y el otro espíritu les contestó que era porque había llegado Bartolomé, un mensajero de Dios, y había atado a ese espíritu y estaba atado y por eso no podía hablar; entonces, mucha gente al oír esas noticias, algunos las tomaron para bien; comenzaron a buscar a Bartolomé para bien y otros para mal.


Gracias a Dios que después de que Bartolomé echó fuera unos demonios, el rey, o sea, el líder de esa ciudad, se llamaba Polimio, llegó a ser después un discípulo de Bartolomé y llegó a ser obispo; pero antes, él era la autoridad secular de la ciudad; al oír lo que sucedía con Bartolomé, él tenía también una hija que estaba endemoniada y que la tenían atada porque era terrible; y entonces le pidieron a Bartolomé si él podía hacer algo; entonces él les predicó a Cristo y pidió que desataran a la joven y nadie se atrevía a desatarla; entonces Bartolomé mismo la desató, la niña fue libre, el demonio huyó, la niña fue liberada y el rey quedó muy feliz; y luego el rey le mandó unos regalos a Bartolomé, pero no lo encontraban para entregarle los regalos; él se escondió para no recibir los regalos; no los recibía. Y después de que él ya no los recibió y volvieron a Polimio, entonces él fue donde Polimio; ahí sí evangelizó a Polimio. Polimio recibió al Señor con su familia, se bautizó, incluso renunció al gobierno y siguió a Bartolomé, y lo acompañó un buen tiempo. Bartolomé también hizo un viaje en el año 60. Pasó hacia lo que es Armenia. Armenia es un país que queda en el Cáucaso, pero que hace poco era de la Unión Soviética. La ciudad a donde llegó Bartolomé está en los límites de Azerbaiján. Allá ya había ido antes el apóstol Judas Tadeo Lebeo, hermano del Señor Jesús, de los menores; él había iniciado un trabajo, y Bartolomé fue a cooperar con el trabajo de Tadeo y estuvieron los dos trabajando en Armenia; mucha gente se convirtió en Armenia, de tal manera que después del trabajo que hicieron estos dos apóstoles, Tadeo y Bartolomé, vino otro líder cristiano después, cuando ya habían muerto los apóstoles; se llamó Gregorio; le llaman "el iluminador". Estos hermanos, digamos, primero los apóstoles y después Gregorio, consolidaron el cristianismo en Armenia, y Armenia llegó a ser el primer país cristiano de la historia; no sólo se convertían personas, sino que el país mismo se hizo cristiano; y los que pusieron el fundamento allá fueron precisamente los apóstoles Judas Tadeo y Bartolomé. Esta es, a grandes rasgos, la vida de Bartolomé.


La transparencia de Bartolomé y del sardio
Bartolomé fue crucificado también; lo crucificaron también cabeza abajo, y así murió para gloria del Señor allá en Armenia; entonces fue un siervo de Dios. La Biblia solamente menciona cosas pequeñas de Bartolomé, pero las suficientes para juntar con su vida y para juntar con su carácter y por qué el Señor lo asocia con esta piedra, sardio. Las características de Bartolomé y las características del sardio son semejantes; el sardio nos muestra una característica especial de Bartolomé. Yo quisiera entonces que miremos primero lo que nos dice la Palabra acerca de Bartolomé, y luego lo comparamos con el sardio. Vamos al evangelio de Juan, al inicio del evangelio. Allí aparece el llamamiento que el Señor hizo de Bartolomé, y las características de él por las palabras del Señor. El vehículo de evangelización de Bartolomé fue su amigo Felipe. Juan 1:43 en adelante: "43El día siguiente quiso Jesús ir a Galilea, y halló a Felipe, y le dijo: Sígueme. 44Y Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y Pedro". Como dice Juan, Natanael no era de Betsaida; era de una ciudad cercana que era Caná de Galilea, donde el Señor convirtió el agua en vino; esa era la ciudad de Natanael. "45Felipe halló a Natanael y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: (en el lenguaje que ellos usaban entre amigos, se nota que ellos eran creyentes, que realmente esperaban la venida del Mesías; ellos tenían el Antiguo Testamento, conocían la ley, conocían los profetas, pero no estaban en una vida legalista solamente, ellos estaban esperando al Mesías; y entonces ese fue el testimonio que le dio Felipe; claro que al principio Felipe apenas estaba comenzando; inclusive el testimonio se lo dio equivocado, porque mire lo que le dijo Felipe: Hemos encontrado) a Jesús, el hijo de José, de Nazaret". Realmente Jesús no era hijo de José sino de María, y no era de Nazaret sino de Belén, pero vivía en Nazaret. Al principio incluso no entendían bien; entonces, él le presentó a Jesús como hijo de José, aunque Él era hijo de la virgen. Jesús vivía en Nazaret pero era de Belén.

Y entonces le contesta Natanael: "46¿De Nazaret puede salir algo de bueno? (noten esa pregunta: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? nunca había sucedido) Le dijo Felipe: Ven y ve. 47Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, (porque ya Felipe lo trajo) dijo de él: (esta es la característica de Natanael; dijo de él, este es no sólo la opinión, sino, digamos, el veredicto del Señor Jesús acerca de quién es Natanael) He aquí un verdadero israelita, en el cual no hay engaño". Es una palabra realmente preciosa; la palabra sin engaño es "adolo", sin dolo; esa palabra aparece también aplicada al mismo Señor Jesús en 1 Pedro  2:22, allí se dice del Señor Jesús: 2"el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca". Del Señor Jesús se dice que no hay engaño, o sea, adolo, sin dolo, sin engaño. Eso mismo, esa misma palabra en el griego se aplica por el mismo Señor Jesús a Natanael; sólo a los dos se les aplica esta palabra característica, al mismo Señor Jesús y a Natanael; como quien dice, esa característica principal del Señor Jesús es la que se formó y llegó a formarse en Natanael, y esa es la característica que vamos a ver después en la piedra; y lo digo de una vez: transparencia; esa es la característica clave del sardio.


Vamos a ver algo respecto al sardio y de Natanael: transparencia. Hemos visto de Pedro que tuvo revelación, jaspe; Jacobo, juzgar el pecado, zafiro; Juan, calcedonia, criptocristalino, modestia, salir del centro; luego viene esmeralda, que es el que aparece como el arco iris alrededor del trono del Señor, que significa lealtad, fidelidad; y entonces vimos sardónica, que es maleabilidad o disposición en las manos del Señor, sumisión en sus manos para ser tratados; y entonces sobre esos fundamentos anteriores, que son cinco, descansa este sexto fundamento; encima de la sardónica está el sardio, y el sardio se identifica porque es transparente; no que sea una piedra blanca, no; el sardio es rojo; es una piedra que empieza marrón, y por el efecto del sol y de los rayos ultravioleta del sol, se vuelve roja y un rojo transparente. Se ha dicho que la composición del sardio es muy diferente de todas las demás y muy característica de él.


Tengo aquí algo tanto del hermano Cristian Chen como del hermano Stephen Kaung; ambos hablan del sardio; ellos dicen que el sardio tiene la capacidad de que la luz pase sin distorsión; el sardio es translúcido; también con el sardio se puede mirar al sol a través de él. Explica el hermano Cristian Chen que las personas no pueden mirar directamente al sol porque se quemarían la vista; entonces lo miran a través de una piedra de sardio; por medio del sardio se puede ver directamente al sol sin peligro y sin distorsión.


Un verdadero israelita
Y volviendo entonces a lo que dice aquí el Señor de Natanael, dice así: "47Cuando vio Jesús a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño". Esta expresión "un verdadero israelita", nos recuerda otras expresiones de Pablo, especialmente en la Carta a los Romanos, donde él habla, pues, que no es israelita el que lo es solamente en lo exterior, sino el que lo es en lo interior. Vamos a ver esas expresiones principalmente en Romanos 2:24 en adelante: "24Porque como está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles por causa de vosotros". Este vosotros aquí se refiere a los judíos que se jactaban en la ley; eran personas que se jactaban en la ley, que hablaban de las cosas de Dios, enseñaban a los niños y todo, pero ellos mismos no eran fieles; entonces la gente que no es consecuente con su testimonio verbal, no es consecuente con su vida, hace que la gente blasfeme. 25Pues en verdad la circuncisión aprovecha si guardas la ley; (sí, ellos se gozaban en que eran circuncidados, en que tenían la señal que Dios le había pedido a Abraham, en que estaban en el pacto con Dios, que los demás eran unos incircuncisos; pero ahora explica Pablo que la circuncisión aprovecha si guardas la ley) pero si eres transgresor de la ley tu circuncisión viene a ser incircuncisión". Eres lo mismo que un gentil. "26Si pues, el incircunciso guardare las ordenanzas de la ley, ¿no será tenida su incircuncisión como circuncisión? 27Y el que físicamente es incircunciso, pero guarda perfectamente la ley, te condenará a ti, que con la letra de la ley y con la circuncisión eres transgresor de la ley. 28Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne; 29sino que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra"; aquí Pablo no está innovando; Pablo está usando palabras mismas del Señor por medio de los profetas; ya Dios había dicho por los profetas que ellos eran incircuncisos; podían ser circuncidados físicamente en el prepucio, pero eran incircuncisos de corazón. Pablo dijo que él no decía nada fuera de lo que ya habían dicho antes los profetas, y eso es lo que dice acá: "no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne, 29sino que es judío el que lo es en lo interior y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios".

Con este trasfondo y otras cosas que también dice Pablo similares en Romanos 9, se entienden mejor estas palabras del Señor Jesús a Natanael y que están representadas por las características de la piedra preciosa sardio o cornalina. "He aquí un verdadero israelita en quien no hay engaño". El Señor vio que era una persona que no aparentaba; no aparentaba ser una cosa y era otra; era una persona transparente, una persona de una sola cara; porque uno puede tener una cara para afuera y otra para adentro; en cambio, Natanael era una persona transparente, una persona recta, una persona sin dolo, sin engaño, sin hipocresía. El Señor trabaje en Su pueblo esas características de la transparencia; tan necesarias que son para nosotros esas características. !Con cuánta facilidad nosotros somos hipócritas! Hacemos unas cosas por un lado, otras por otro lado, y la gente piensa que estamos haciendo sólo las de la derecha y no se dan cuenta de las de la izquierda; o los que ven el lado izquierdo no saben las del lado derecho. En cambio, el Señor Jesús mismo primero Él era sin engaño, no había engaño en su boca, Él era transparente y directo, y esta era la característica que el Señor vio en Natanael; él fue escogido, y ya Dios estaba tratando con él, y ahora iba a seguir siendo tratado, iba a ser una piedra preciosa de sardio. A Natanael le habló lo que era la edificación.


A través del sardio se puede mirar al sol
Sigamos leyendo: "48Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? (Como quien dice, pues, no nos conocemos nosotros; ¿tú por qué me vas a conocer a mí? ¿de dónde tú me conoces a mí?) Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi". Probablemente Natanael acostumbraba apartarse debajo de la higuera, a la sombra; quizá oraba en privado a Dios; quizás al orar en privado sus expectativas eran mesiánicas. Y se sorprendió cuando vio que Jesús conocía su intimidad.

Inmediatamente Natanael pensó: ¿Quién es este? ¿Quién es este que sabe mis cosas íntimas? ¿Quién es este? Apenas estaba llegando, y el Señor dijo a todos de él: "He aquí un verdadero israelita, en el cual no hay engaño". ¿De dónde me conoces? Cuando estabas debajo de la higuera, te vi; esa no es una frase simple; es un discernimiento profundo del Señor a Natanael, y un captar Natanael quién era el que estaba discerniendo sus secretos con Dios. "49Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel". Note la confesión: "Hijo de Dios y Rey de Israel". Pedro también había dicho: "Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente"; Felipe le dijo: Hemos hallado al Mesías, Aquel de quien habló Moisés. "50Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás". Más revelación tendría Natanael. "51Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: (aquí ya no sólo habló a Natanael, sino también ahí estaba Felipe con él) De aquí en adelante veréis el cielo abierto, (note lo curioso del sardio; a través del sardio se puede mirar al sol; es una piedra que te permite mirar el sol. Cuando va a haber un eclipse, la gente dice: no mires directo al sol, que te daña la vista, que necesita unos determinados filtros para poder verlo; pues, el filtro perfecto es el sardio) y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre". Estas palabras de Jesús son semejantes al sueño de Jacob; cuando Jacob durmió, tuvo aquel sueño donde él vio aquella escalera donde había ángeles que subían y descendían, y había comunicación del cielo con la tierra; y él le llamó a ese lugar Bet-el; prácticamente es como si el Señor le estuviera diciendo con otras palabras a Natanael Bartolomé lo mismo que le dijo a Pedro. A Pedro le dijo: "17No te lo reveló carne y sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 18Y yo también te digo, que... y sobre esta roca edificaré mi iglesia" (Mt. 16:17-18). Y ahora le está diciendo prácticamente lo mismo a Natanael, que la primera piedra es Jesús, que Él es la piedra de cabecera, que los ángeles que suben y descienden es sobre Jesús que es la primera piedra, pero que ellos son los asociados. "De aquí en adelante veréis el cielo abierto y ángeles que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre". Ahí entonces Natanael siguió al Señor.


Veamos la segunda mención y la última; porque en Mateo, Marcos y Lucas solamente se le menciona por nombre; dicen: Bartolomé y nada más; claro, cuando se habla de los doce, o de Sus discípulos, bueno, ahí está incluido Bartolomé. Pero algo específico de él, lo que el Espíritu Santo nos quiso dejar, es esta primera característica; y la última mención de él aparece en Juan 21:1-2: "1Después de esto, Jesús se manifestó otra vez a sus discípulos junto al mar de Tiberias; y se manifestó de esta manera: 2Estaban juntos Simón Pedro, Tomás llamado el Dìdimo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo, y otros dos de sus discípulos. 3Simón Pedro les dijo: (les quiero llamar la atención a este aspecto que aparece aquí, en lo cual estaban también los otros discípulos; pero aquí Natanael fue mencionado de una manera muy especial: "Natanael el de Caná de Galilea"; esto es válido no sólo para Natanael, es válido para Pedro, es válido para todos; pero aquí es la segunda y última mención de Natanael en la Biblia, con respecto a las propiedades del sardio y las características de Natanael: la transparencia "verás el cielo abierto", la capacidad de ver) Voy a pescar. Ellos le dijeron: (ahí también esta Natanael) Vamos nosotros también contigo. Fueron y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada". Eso lo hace el Señor; podían haber pescado, pero el Señor no lo permitió. Es como si el Señor le hubiera dicho a los peces: háganse al otro lado, no donde ellos están pescando; ustedes, pecesitos, se hacen a este lado; entonces los peces se hicieron al otro lado; ellos pescaban para allá y los peces a este lado. A veces el Señor hace eso; el Señor nos está hablando cuando no podemos pescar; quiere decir que estamos tirando la red en el lado equivocado; entonces, el lado correcto es este que aparece acá: 4"Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa; mas los discípulos no sabían que era Jesús".

Quiero llamar la atención a esto, como dice Pablo hablando a los Corintios en ambas epístolas. En la primera dice: Porque el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, pero el espiritual discierne todas las cosas; noten esto: a través del hombre natural no se puede conocer bien al Cristo resurrecto. San Pablo también dijo en la segunda a los Corintios que si en la carne conocimos aun al Señor Jesús, ya no lo conocemos así; al Señor Jesús ahora ya no se le conoce según la carne o según la naturaleza humana; al Señor Jesús se le tiene que reconocer o discernir espiritualmente; y quiero que ustedes vean aquí en esta experiencia donde aparecen Natanael y sus compañeros las dos situaciones: la del hombre exterior, el hombre natural que no entiende, que duda, y la del hombre interior; lean con cuidado: "no sabían que era Jesús (eso es el hombre natural, no sabían que era Jesús). 5Y les dijo: Hijitos ¿tenéis algo de comer? Le respondieron: No. 6Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces. 7Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba (Juan) dijo a Pedro: ¡Es el Señor! (primero no entendían por fuera; por dentro: ¡Es el Señor!) Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa ( pues se había despojado de ella) y se echó al mar. 8Y los otros discípulos (Juan, Tomás, Natanael, Jacobo y los otros) vinieron con la barca, arrastrando la red de peces, pues no distaban de tierra sino como doscientos codos". Más o menos una cuadra. "9Al descender a tierra, vieron brasas puestas, (miren lo que vieron; no dice que vieron todavía bien a Jesús) y un pez encima de ellas, y pan". El Señor, ¡qué misericordioso! Aunque ellos traían cantidad de peces, él no esperaba que ellos cocinaran esos peces, sino que Él ya los tenía preparados. Ese es el carácter del Señor. "10Jesús les dijo: Traed los peces que acabáis de pescar. 11Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió. 12Les dijo Jesús: Venid, comed. (miren acá el hombre exterior) Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú quién eres? (ahora viene el hombre interior) sabiendo que era el Señor". Hay una situación doble: el hombre exterior no podía conocer bien a Cristo resurrecto. ¿Pero quién es? ¡es el Señor! ¿Tú quién eres? "sabiendo que era el Señor"; o sea, el hombre interior sabía que era el Señor; pero el exterior por fuera preguntaba.

En Mateo también, al final cuando apareció resucitado, ahí se ven los dos aspectos; allí comienza el Señor, al final prácticamente, cuando les aparece a ellos. Mateo 28:17 "17Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban". Ahí están las dos actitudes: el hombre exterior duda; el hombre interior discierne; por el hombre exterior dudaban: ¿Tú quién eres? No se atrevían a preguntarle ¿quién eres? pero interiormente sabían que era el Señor. Por el Espíritu se conoce al Señor; los conocimientos naturales no son suficientes; los conocimientos del hombre natural siempre nos van a dejar en dudas; podemos estudiar toda la teología que sea necesaria, no está mal, hay que estudiarla, está bien, puede ser útil, pero ella nunca va a cumplir el papel que sólo cumple la revelación en el hombre interior; en el hombre interior es donde verdaderamente se conoce al Señor; al Señor se le conoce no naturalmente sino espiritualmente. Por fuera querían preguntar pero no se atrevían ¿quién eres? Esa pregunta ¿quién eres? es como si no pudieran estar seguros con el hombre natural; ¿quién eres? pero en cambio, el hombre interior sabía quien era el Señor Jesús. Así también, cuando Dios nos revela algo, tenemos la certeza, que no sabemos cómo nos llega esa certeza en el hombre interior; es una percepción, no es solamente una deducción natural, es una percepción en el espíritu.


El sardio se consigue en los desiertos
Hermanos, vamos a mirar un poquito del sardio, de lo que nos habla esa piedra, puesto que el nombre de Natanael Bartolomé fue colocado en el sardio. En primer lugar voy a hablarles un poquito del sardio; el nombre sardio viene de Sardis, porque en Sardis se encontraba bastante el sardio; pero los principales lugares donde se consigue el sardio, y les llamo la atención a este detalle, es en los desiertos; principalmente en los desiertos de Arabia y la parte de Egipto que es desierta; la Península del Sinaí y los desiertos de Egipto y de Arabia son las principales fuentes de sardio; eso nos llama la atención.

Cuando se dice de Natanael que era un verdadero israelita, que era una persona auténtica, era una persona honesta, quiere decir que no es una persona que es arrastrada fácilmente por los decires. Noten cómo le respondió inmediatamente a Felipe: ¿De Nazaret acaso puede salir alguna cosa buena? Él era una persona que no se dejaba llevar, era una persona que comprobaba, una persona que no se guiaba por la corriente, sino una persona que quería conocer las cosas personalmente, comprobar las cosas; y eso me habla del sardio. El lugar donde el sardio se consigue es en desiertos, desiertos de Arabia, desiertos de Egipto; no es una piedra que se encuentre en otros lugares, sino precisamente en lugares aislados, en lugares desolados. Eso nos muestra que a veces el Señor nos tiene que sacar al desierto para hablarnos, porque mientras estemos en el ambiente, el ambiente nos sofoca.


El Señor le dijo a Oseas que Él sacaría al desierto a esa novia Suya, y allá en el desierto le hablaría (Oseas 2:14). ¿Por qué la tiene que sacar al desierto? porque mientras estuviera en el medio ambiente, allí estaba completamente sofocada. Lo mismo me pasó personalmente; en ese testimonio de mi conversión a Cristo, que les dije se llama "Caminante", ahí les cuento mi propia experiencia; mientras vivía aquí en Bogotá, estudiaba psicología en la Universidad Nacional; todos los días leía libros, o veía alguna película, o veía alguna exposición, o componía algo, o escribía algo; estaba en un ambiente en que no tenía tiempo como para meditar. Para el Señor poder tratarme, me llevó al desierto literal del Atacama, el desierto del Perú y de Chile, y ahí pase solo el desierto; a veces no me recogía nadie y me pasaba un día entero en el desierto, y ahí no me quedaba sino Dios, la vía entera y el desierto; no había nadie. Entonces, el Señor lo saca a uno al desierto, como para sacarle todas las cosas que lo sofocan a uno, como para que la persona pueda meditar y tener su identidad; cuál es su verdadera identidad, autenticidad; no ser llevado por cosas sino estar realmente sabiendo qué es lo que en verdad se quiere. Esa es una característica del sardio. Me imagino a Natanael orando y meditando solo bajo la higuera.


Otra característica del sardio es el color; el color del sardio es rojo; el sardio también es una piedra formada por silicatos, así como la calcedonia; son parientes de la calcedonia, sólo que el sardio es translúcido, el sardio es como si tú hubieras agarrado una calcedonia y la hubieras cocinado; entonces, el hierro que tiene le da el color rojo. En la Biblia, el hierro tiene un significado espiritual, que es la autoridad. Por ejemplo, dice la Palabra del Señor que a los vencedores les dará autoridad sobre las naciones y las regirán con vara de hierro (Ap. 2:26-27). Así como el oro representa la naturaleza divina, la plata la redención, el cobre o el bronce el juicio, la disciplina de Dios, así el hierro representa la autoridad de Dios. Con el sardio acontece una cosa; después les voy a leer lo que dicen los hermanos Stephen Kaung y Cristian Chen sobre el sardio, que es de los únicos que encontré algo; lo único que he encontrado sobre el sardio en lo espiritual son esos textos de estos hermanos, los únicos que hablan algo del sardio. El sardio inicialmente es una piedra que parece de color marrón; la piedra es de color marrón; pero esa piedra a la luz del sol se transforma en roja y es translúcida; pero primero es oscura; lo que aclara la piedra es el sol; entonces, los rayos ultravioleta del sol hacen que el sardio se vuelva rojo, y ese rojo es debido a las trazas de hierro que tiene adentro. Es interesante, es como si nosotros, digamos, somos oscuros en nosotros mismos; nosotros no podemos; pero al estar a la luz del sol, expuestos a nuestro Sol de Justicia que es el Señor, el Señor nos redime, el Señor nos hace rojos, hace que ese hierro que tienen adentro las composiciones del silicato del sardio, comience a aparecer; e incluso sucede con la calcedonia; si tú pones una calcedonia al sol, se va poniendo roja por causa del hierro; tanto el sol como la humedad hacen eso en la calcedonia, y hacen eso en el sardio; el sardio se pone rojo y es una piedra preciosa.


Características del sardio
Estamos viendo varias características del sardio; una primera característica es la transparencia; es una piedra transparente con la que puedes mirar el sol a través de ella; y es una piedra que se transforma de marrón en rojo, una piedra que se hace roja; y una tercera característica del sardio es que el sardio es una de las piedras más pulibles; en cuanto a tallar la piedra, la sardónica, que es una variedad de ónice que es rojo y blanco, con bandas de rojo y blanco, ella se puede trabajar más; pero pulir, pulirla, es justamente el sardio; el sardio se caracteriza porque es una piedra que se puede pulir muy bien. Cuando el Señor vio a Natanael, dijo: He aquí un verdadero israelita; le dijo: ¿ahora crees? mayores cosas verás; como quien dice: Yo voy a pulirte más. Empecé contándoles la historia de Natanael Bartolomé, cuál fue su vida, cómo lo usó el Señor, prontamente cómo dio su vida hasta la muerte; ahí vemos cómo realmente él fue pulido; es una piedra que se puede pulir muy bien, es una piedra que es transparente, pero que es de color rojo porque ese color se lo da el hierro; cuando se acepta la autoridad del Señor, se hace transparente; es la combinación del sol y el hierro lo que le da el color rojo; combinación del sol y el hierro; quiere decir que el someterse a la autoridad del Señor lo transforma y le da ese rojo precioso. Voy a mostrarles aquí algunas fotos del sardio cuando está en bruto; y ustedes se van a dar cuenta que tiene un color rojo; algunos por eso le llaman carneola, porque es un rojo sangre o un rojo carne. Aquí entre todas estas piedras que aparecen acá, este es el sardio; este collar es de cornalina, como de piedras más claritas; esa es la cornalina; y este que está aquí arriba es el sardio; aparece de color rojo; es una piedra roja; por eso en el idioma hebreo se le dice odem, y odem significa rojo; y por llamarse rojo, algunos traductores la han traducido rubí, pero no es el rubí; el rubí es de la familia de los corindones, pariente del zafiro; en cambio el sardio es de los silicatos; entonces es una piedra diferente del rubí, pero por el rojo, y como la palabra en hebreo es odem, que quiere decir rojo, entonces algunos la tradujeron como si fuera rubí, pero realmente la palabra es sardio.

La tribu del sardio es Rubén
Esa piedra roja aparece en el trono de Dios y su color aparece en la bandera de Rubén, y le corresponde a la tribu de Rubén. Veamos eso primeramente; Éxodo 28; la primera de las piedras que se menciona en el pectoral del sumo sacerdote, en el Urím y Tumim, es el sardio. Éxodo 28:17: "17Y lo llenarás de pedrería en cuatro hileras de piedras; una hilera (note, la primera hilera y la primera piedra que menciona) de una piedra sárdica". No confundas sárdica con sardónica; el sardónice es una variedad roja con blanco del ónice, que ya lo estudiamos el viernes; esta no es sardónica sino sárdica, o sea, sardio. Noten que la primera piedra que corresponde al primer hijo de Jacob, que es Rubén, es una piedra sárdica; el sardio aparece con la primogenitura; la primogenitura le correspondía a Rubén. Leamos la profecía de Rubén en Génesis 49; allí Jacob comienza a profetizar a sus hijos, y dice: "1Y llamó Jacob a sus hijos, y dijo: Juntaos y os declararé lo que os ha de acontecer en los días venideros". El Señor se le reveló a Jacob, y él juntó a sus hijos para profetizarles: "2Juntaos y oíd, hijos de Jacob, y escuchad a vuestro padre Israel". Al primero al cual le habla es a Rubén; y por eso a esa piedra roja le dicen rubí, de Rubén; a algunas piedras rojas les llaman también rubelitas; son diferentes, pero son rojas, y por eso las ponen en asociación con Rubén. "3Rubén, tú eres mi primogénito, mi fortaleza, y el principio de mi vigor; principal en dignidad, principal en poder. 4Impetuoso como las aguas, no serás el principal". El verdadero primogénito, el verdadero primero es el Señor Jesús. La idea que Dios tenía con los primogénitos es que se respete a sus primogénitos; la Biblia habla de la congregación de los primogénitos, habla que el Señor Jesús es el Primogénito. Dios pedía que se le consagraran los primogénitos. El objetivo de los primogénitos era representar al Señor mismo; y Rubén, que era el primogénito de Jacob, era el que tenía la responsabilidad de representarlo; y por eso la primera piedra era una piedra sárdica.

En el trono, en Apocalipsis 4, el Señor aparece como de jaspe, que era la última, y como cornalina que es sardio, como dice en el griego, que es la primera; porque el Señor es el Primero y el Último, el Principio y el Fin, el Alfa y la Omega; y por eso aparecían esas dos piedras, el jaspe que es el último y que llega a ser el primero, y luego el sardio que es el primero, pero que luego lo desbancan también, porque dice la profecía: "no serás el principal, por cuanto subiste al lecho de tu padre; entonces te envileciste, subiendo a mi estrado". Dios es el que al último lo hace primero y al primero, último; o sea, el que humilla al que se exalta y exalta al que se humilla. Rubén, pues, tenía esta profecía; era el primogénito, el que debía representar al Señor; pero él falló; para él era ese llamamiento. La piedra de Rubén es la piedra sárdica, que algunos dicen que es el rubí, pero realmente es el sardio. Habían banderas en cada uno de los extremos de Israel; la bandera de Rubén era una bandera roja con unas mandrágoras, porque Rubén encontró unas mandrágoras y entonces se las trajo a Lea su madre; y Raquel le pidió las mandrágoras a Lea, y ésta le dijo: ¡Ah!, me quitaste a mi esposo, ¿ahora también me quieres quitar las mandrágoras de mi hijo? entonces Raquel le dijo: Bueno, te alquilo a Jacob; que él duerma contigo si tú me das de las mandrágoras de tu hijo; entonces, yo te voy a dar por esta noche a Jacob; y Lea compró a Jacob con las mandrágoras. Las mandrágoras, pues, aparecen en la bandera de Rubén, que es una bandera roja con mandrágoras.


El sardio en el trono de Dios
Apocalipsis 4. "1Después de esto miré y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y yo te mostraré la cosas que sucederán después de estas. 2Y al instante yo estaba en el Espíritu; y he aquí, un trono establecido en el cielo, y en el trono, uno sentado. 3Y el aspecto del que estaba sentado era semejante a piedra de jaspe y de sardio; (la palabra en el griego es sardio; se tradujo cornalina porque es una variedad de sardio) y había alrededor del trono un arco iris, semejante en aspecto a la esmeralda". Solo aparecen tres piedras en el trono representadas, que son: el jaspe, el sardio y la esmeralda; el ónice aparece también en los hombros del Señor ¿verdad? las piedras de los hombros; pero solamente el sardio, el jaspe y la esmeralda aparecen en el trono. ¿Qué nos quiere mostrar Dios cuando dice que Él en aspecto es semejante al jaspe y al sardio? especialmente ¿qué tiene que ver el sardio? Yo pienso que el color del sardio nos habla de la redención de Dios en Cristo. Dios es Creador consumador, Dios es el Creador, Dios es el que sustenta todas las cosas; todas las cosas son de Él, por Él y para Él, y eso está representado en el jaspe, porque el jaspe es la piedra que más aparece en la Nueva Jerusalén, que es la consumación del plan de Dios; la última piedra era Benjamín, y es jaspe, es la consumación. Pero no puede haber consumación sin la redención; el plan de Dios no se puede completar si Cristo no hubiera venido y hubiera muerto. Por eso es que aparece junto con el jaspe el sardio, que es el color rojo, el Redentor; a la diestra del Padre, en el mismo trono del Padre; no es en otro trono sino que en el trono del Padre, está el Hijo; y ese atributo redentor de Dios fue expresado en la encarnación del Verbo de Dios, en Su aspecto expiatorio, en Su obra por nosotros; entonces aparece el jaspe asociado al sardio; el jaspe y el sardio; tiene que ver también con redención. Estamos viendo que esta piedra tiene bastantes significados por el color rojo, por la expresión transparente, porque a través de ella se puede mirar el sol, porque se puede pulir y porque representa la redención; esa piedra tiene un nombre; ¡qué cosa tremenda! el nombre de Natanael, el nombre de Bartolomé, que era un hombre caracterizado por su carácter, por su rectitud, por su transparencia, porque tenía una sola cara; y esa piedra se forma en los desiertos e inicialmente no es muy transparente, inicialmente es un poco marrón. Pero puede volverse transparente, no blanca sino que puede hacerse muy translúcida por el efecto del sol, por el efecto de la luz ultravioleta, por el pulido que se le hace; y llega a ser una piedra de tal aprecio para el Señor que aparece Él mismo en aspecto de jaspe y de sardio, y aparece en el primer lugar pues es la primera que se menciona en el Urim y Tumim, en el pectoral del sumo sacerdote. Dios quiso colocar en ella el nombre de Natanael Bartolomé.

Las características de las piedras preciosas reflejan el carácter de Cristo
El sardio descansa, en el orden de los cimientos, encima de la sardónica; así como por el trabajo de Felipe se llegó a Natanael Bartolomé, nos damos cuenta de lo que significa en cuanto a los aspectos de la formación de Cristo que se ve en estos apóstoles; ese aspecto de la transparencia descansa en los aspectos anteriores; primeramente revelación, juicio al pecado; cuando ya hubo juicio al pecado, uno se sale del centro; cuando se sale del centro es una persona leal, y una persona maleable o tratable; y entonces es un persona transparente. Esas características son las que el Señor tiene, y son las que Él ha formado en Sus discípulos, y son las que Él forma en la Iglesia; yo pienso que a todos nosotros nos tocarían estas características, en todo lo que veamos; no somos transparentes, somos hipócritas; apliquémosle la cruz, pongámonos bajo la autoridad del Sol, dejemos que el sol y el hierro nos cambien lo marrón en rojo translúcido, en rojo que permite que a través de él se pueda ver el sol de frente. Hermanos, muchas veces uno se descubre siendo hipócrita, uno se descubre fingiendo, uno se descubre teniendo sus marrullas secretas; nosotros nos descubrimos al ponernos a la luz del Señor y al someternos a Su autoridad, aplicar la luz; el Señor nos va haciendo translúcidos, el Señor nos va haciendo transparentes.

Ahora leamos lo que Stephen Kaung y Cristian Chen dicen acerca del sardio. Citamos el libro del hermano Stephen Kaung, que se llama "El Reino y la Iglesia", "The Kingdom and the Church", está en inglés, voy a traducirlo. Hay una página que habla sobre el sardio; son los únicos hermanos a quienes les he visto hablar de eso. Aquí el hermano habla del jaspe, del sardio y de la esmeralda; y aquí en este libro "Piedras preciosas" Cristian Chen habla del sardio; de ninguna otra piedra más hablan ellos; pero ya que hablan del sardio, quiero leerles. Dice el hermano Stephen Kaung: "Tome otra piedra, el sardio; esta piedra es la primera en el pectoral del sumo sacerdote, que es la sexta en la fundación de la Nueva Jerusalén. En Apocalipsis 4, la apariencia de Dios en el trono es semejante a jaspe y a sardio; nos es dicho, en el hebreo, que sardio, odem, significa rojo; esta es una piedra roja; tradicionalmente está conectada a nuestro Señor Jesús, nuestro Salvador y Su sangre. Nos es dicho que entre todas las piedras, esta piedra puede ser muy finamente pulida; es tan transparente que cuando usted la pone delante de la luz, la luz brillará a través de ella; ahora esto te dice: a través de la sangre del Señor Jesús, Él nos limpia a tal grado que llegamos a ser transparentes. La vida de nuestro Señor Jesús sobre la tierra fue transparente; en Él no había opacidad, ni por delante ni por detrás; Él no era sino un solo hombre para los hombres y para sí mismo. Nuestro Señor Jesús era transparente; no tenía nada oculto; eso es lo de Su carácter que necesita ser edificado en nosotros. ¡Cuán opacos somos nosotros, vasos terrenales! Nosotros no podemos hacernos transparentes por nosotros mismos; nosotros jugamos a ser actores en el mundo, e incluso en la Iglesia también actuamos; no somos reales, no somos transparentes. ¡Cuánto necesitamos que el Espíritu Santo nos convenza y quite de nosotros toda opacidad y oscuridad que tengamos! Que la luz de Dios pueda brillar a través de nosotros; esa es la piedra de sardio, la piedra que es uno de los fundamentos de la Nueva Jerusalén". Esto es lo que nos dice nuestro hermano Stephen Kaung en este libro: "El Reino y la Iglesia".


Alguna diferencia de interpretación
El hermano Cristian Chen también habló aquí en este libro, "Piedras Preciosas", sobre el sardio; él no entró en ninguna otra piedra, sino que solamente tomó la del sardio; aunque la formación del sardio, la aplicó a las demás; él se concentró en el sardio. Hay una pequeña y mínima diferencia que tengo con el hermano Cristian Chen en la interpretación de la disposición, pero igual lo voy a leer como él lo dice; él ordena las piedras en un orden diferente al que yo les presenté; yo les presenté el orden en que aparecen en el pectoral, y porque también Dios había dicho que era en orden de nacimiento; él las presenta en un orden diferente, porque en el tabernáculo en el desierto, había tres tribus al norte, tres tribus al sur, tres tribus al oriente, y tres tribus al occidente; la primera tribu que había al oriente era de Judá, en el desierto; pero en Ezequiel varía esta disposición. Entonces, Cristian Chen no cuenta las piedras en el orden de nacimiento de los hijos, sino en el orden de la disposición alrededor del tabernáculo; sólo que en esa disposición no aparece Leví y aparecen dos de los hijos de José, que fueron los que Jacob tomó de José; aparecen Manasés y Efraín, no aparece Leví; por lo tanto, yo no me animé a tomar el mismo orden que él toma, puesto que en esa disposición no aparecen los doce hijos, y no se tiene en cuenta lo que el Señor dijo, que era en orden de nacimiento; pero, esas son cosas menores. De todas maneras lo importante es el sentido espiritual. Entonces voy a traducirles lo que dice el hermano Cristian Chen. Esta obra está en portugués, y también voy a procurar traducir al español; dice el hermano Cristian Chen:

"La primera piedra que se encuentra en el pectoral del sumo sacerdote se llama sardio y representa a Judá; el campamento de Judá está en el este, y la Biblia dice que es en el este donde nace el sol; con ese hecho en mente, podremos encontrar mejor la visión que Dios quiere enseñarnos a través del sardio. En primer lugar ¿qué es el sardio? ¿Cómo se forma la piedra de sardio? Usted sabe que Judá era muy inmoral; en la genealogía de Cristo nos es mostrado que Judá consiguió su hijo a través de Tamar; mas ¿quién era Tamar? Tamar era su nuera; usted conoce esa historia; de la carne usted no puede esperar nada mejor que eso, mas gracias a Dios, Dios realmente transformó a Judá; el mismo Señor Jesús desciende de la tribu de Judá; eso significa gracia, perdón. Después de la transformación que Dios operó en la vida de una persona como Judá, el Mesías proviene del linaje de Judá; por esa razón Dios debe ser alabado. Cuando usted esté siendo transformado en sardio, Dios debe ser alabado; por esta razón Judá significa loor, loanza, de Él ser alabado. El color original de esa piedra preciosa es marrón; es un color muy rico; es como un color translúcido; a través de esa piedra usted puede mirar al sol; naturalmente usted no puede mirar directamente al sol, mas como esa piedra es translúcida, usted puede mirar al sol a través de ella. Si usted compara la primera piedra en el Antiguo Testamento y la primera piedra en el Nuevo Testamento, usted va a percibir la diferencia. En el Antiguo Testamento, la primera piedra era translúcida; eso significa que era semitransparente; en el Nuevo Testamento, entre tanto, la primera piedra es transparente. De acuerdo con Pablo, la gloria del Nuevo Testamento es mucho mayor que en el Antiguo Testamento. Somos transformados mirando el sol, más que lo eran ellos. El color original del sardio es marrón y Judá estaba en el este, la dirección donde nace el sol; el sardio representa a Judá; mas, hermanos, ¿cuál es el carácter? ¿cuál es la personalidad del sardio? Cuando él está debajo de la luz del sol, su color comienza a mudar y pasa del marrón al rojo; hermanos, eso significa que la gloria se torna mayor cuando nuestro rostro está en dirección al nacimiento del sol. Nuestro Cristo es el Sol de Justicia; incluso cuando nosotros somos transformados en una piedra preciosa, necesitamos seguir mirándolo a Él; y cuando estamos bajo esta luz que viene de Él, nos tornamos mucho más gloriosos. El sardio de color rojo es mucho más precioso que el sardio del color marrón; ese color rojo puede ser visto siempre que la piedra esté debajo de los rayos solares, expuesta a los rayos del sol. Gracias a Dios, en la realidad es Judá; y fue a través de Judá que el Mesías vino al mundo. ¿Por qué esa tribu es tan gloriosa? ¿por qué nos acordamos de la tribu de Judá? Porque el Sol de Justicia viene de Judá; el Mesías vino de esa tribu; por esa razón descubrimos que esta tribu es la más gloriosa. En Judá, en el principio, el color es marrón, mas por causa de Cristo el color ahora se torna rojo; es mucho más precioso. ¿Cómo usted consigue el sardio? ¿qué es el sardio? ¿cuál es el material con que se hace el sardio? Si usted analiza el sardio en el laboratorio, descubrirá que él está compuesto del material silicio; tenemos que recordar que en la costra terrestre hay algunos elementos más abundantes que otros; todos esos elementos se encuentran en todo lugar; uno de ellos es el oxígeno, otro es el silicio; entonces cuando el oxígeno y el silicio se combinan, se obtiene cuarzo. ¿Usted sabe lo qué es el cuarzo? Si usted no conoce el cuarzo, déjeme convidarlo a la playa; vamos a Copacabana, por ejemplo, llene su mano de arena y usted verá el cuarzo; el cuarzo es un mineral compuesto de silicio. ¿Usted se acuerda cómo Dios comparó los descendientes de Abraham con la arena? Ellos no eran más que cuarzo; usted puede encontrárselos en cualquier lugar, mas, por la misericordia del Señor, de alguna manera esa arena fue transformada en piedra y después en piedra preciosa; ¿cómo ella es transformada? La historia es la siguiente: Cuando un volcán está en erupción, se derrama mucha lava; podemos entender mejor cómo eso acontece si imaginamos que el volcán cierto día estaba con mucha rabia y por causa de eso escupió hacia afuera una gran piedra; esa piedra que fue rechazada vino de una temperatura altísima, muy caliente. Algo acontece cuando esa piedra comienza a enfriarse; dentro de ella existe un tipo de gas, el cual sale hacia afuera de ella; después que ese gas sale de la piedra, se forma entonces una cavidad dentro de la piedra, porque Dios está operando todo en todo y de alguna manera comienza a entrar agua en esa cavidad, y algo se forma como de arena, y después de alguna manera, esta arena es transformada en piedra preciosa, en sardio. Hermanos, ¿será que no podemos comparar ese cuadro con nuestra vida aquí en esta tierra? Este mundo es como un gran volcán; por esta razón Jesús dijo: "No améis al mundo"; el mundo odió a Jesús, y por eso, ellos también nos odian; ser rechazados por el mundo es una cosa natural. ¿Qué es ser un discípulo? Ser un discípulo significa hacer parte de un grupo de personas que fueron rechazadas por el mundo. Esas personas fueron lanzadas fuera del volcán; gracias a Dios que ellos son llamados a afuera con la esperanza de un llamamiento, los cuales a través de la obra del Espíritu Santo, a través del fuego y a través del agua son transformados. Yo hallo esta ilustración muy linda; nosotros pasamos por el agua y por el fuego, y finalmente, el sardio es formado. Si supiésemos el proceso a través del cual estas piedras son formadas, entonces podemos saber cómo un gusano se transforma en mariposa; después que esa transformación acontece, Dios puede habitar en medio de Su pueblo. Podemos ver que en todo ese proceso, toda esa historia de Romanos 12:1-2, puede el Señor hablar a nuestro corazón, y podamos ver cuán bella y hermosa es esta ilustración; infelizmente no podemos estudiar el proceso de formación de las otras piedras, mas voy a darle algunas sugerencias: Si usted quisiera continuar este estudio, yo encuentro que lo mejor a hacer antes de que usted estudie las otras piedras, es estudiar la historia completa de los hijos de Jacob y también estudiar la historia de las tribus de Israel. Para eso usted precisará de toda la Biblia; después, teniendo este conocimiento básico, usted estará en condición de estudiar esas piedras preciosas. Después que usted descubre el carácter de esas piedras preciosas, después que usted sabe cuál es el color de ellas, cuáles son sus características, entonces usted las puede comparar con la historia de los hijos de Jacob; usted también podrá verse a sí mismo en los hijos de Jacob".


Esta era la lectura; termino diciendo lo siguiente: el sardio aparece como el número seis de los cimientos donde está el número 6 de los apóstoles escrito allí: Natanael Bartolomé; el sexto mes es el mes de Elul, que corresponde al número seis, en cuanto a apóstoles, en cuanto a piedras y en cuanto a meses. El mes de Elul va desde la segunda quincena de agosto a la primera quincena de septiembre; ese es el mes cósmico y bíblico que es el sexto mes, cuyo nombre es Elul, y le corresponde al sardio. Gracias, hermanos. Vamos a orar. ☐

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